Jugando. Así nos parece que es la forma más efectiva de que los niños de hoy se conviertan en grandes defensores del planeta en el mañana. Porque, ¿habrá algo que guste más a un niño que jugar? Si a esto le sumas que puede pasar tiempo de calidad con su familia aprendiendo a respetar el mundo, ¡tenemos la combinación ganadora para todos! Saca papel y lápiz si estás dispuesto a jugar con nosotros para ganarle la partida al cambio climático y al calentamiento global:
¿Conoces la frase de Teresa de Calcula que decía aquello de: “No te preocupes si tus hijos no te escuchan, te están observando todo el tiempo”? Con ello viene a decir que los niños aprenderán de tu ejemplo. Por eso creemos fundamental que te acompañen y te vean cómo reciclas. Irán interiorizando poco a poco este hábito.
Cuando aún son muy pequeños y están aprendiendo los colores, en torno a los 2 años, puedes enseñarles, por un lado, los colores y, por otro, a asociarlos con los materiales que deben ir en cada contenedor. Así, sin darte cuenta, aprenderán.
¿Les gusta el deporte a tus hijos? Entonces esta actividad les va a entusiasmar. Van a jugar con los cubos de reciclaje de casa a “canastar” el material reciclado que toque. Lo ideal en este juego es hacerlo con papeles que se conviertan en pelotas.
Te aseguramos que una visita a una planta de reciclaje, como la nuestra de eRecycling, no dejará indiferente a ningún niño. Esta actividad es perfecta para hacerla en familia o con sus compañeros de clase para que sean conscientes de todo el proceso de reciclaje de principio a fin.
¡Hora del cuento! Al finalizar el día, antes de irse a dormir, acabar con una historia sobre sostenibilidad y medioambiente nos parece una idea de lo más acertada. ¿Tienes ya algún título en mente? ¡Cuéntanos en comentarios!
Si tus niños solo se motivan cuando hay una pantalla delante, ¡tenemos la solución! Busca juegos online, para ordenador o aplicaciones en el móvil que fomenten su interés por el reciclaje. Otra opción que no falla es la de apostar por dibujos animados donde potenciemos este respeto. ¿Lo has probado ya?
Pueden colorear o pintar temáticas relacionadas con el medioambiente o ir más allá construyendo una nave espacial, un disfraz de robot o un sombrero, por ejemplo, con materiales que en principio iban a acabar en la basura. El límite lo pondrá su imaginación, ¡y la de los niños, por suerte, es desbordante!
Probablemente haya basura o desperdicios que recoger. Por eso puede ser una gran oportunidad para enseñarles a reciclar y a amar la naturaleza.
¿Se te ocurren otras ideas para concienciar a los niños en el reciclaje?