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¿Cómo saber si un alojamiento es sostenible?

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¿Quieres saber si un alojamiento es sostenible para apostar por un turismo más eco en tus próximas vacaciones? ¡Nos alegra saberlo! Porque, aunque no lo creas, las estimaciones apuntan a que las actividades turísticas provocan en torno al 5% de las emisiones globales a la atmósfera. Es más, la huella de carbono de los establecimientos hosteleros alcanza ya el 20% del total, según los últimos datos de la Organización Mundial del Turismo. Así que, antes de hacer las maletas, repasa estas pistas para descubrir si un alojamiento es tan ecofriendly como piensas.

 

Qué es un alojamiento sostenible

Como definición general para saber si un alojamiento es sostenible o no podemos decir que debe tener en cuenta, tanto en su diseño como en su gestión, ciertos principios sociales, culturales, y, por supuesto, medioambientales, para respetar su entorno y su biodiversidad. También incluiríamos en esta categoría a los hoteles, albergues, hostales o establecimientos afines que, aunque en sus inicios no fueron concebidos para ser “verdes”, sí que están implementando medidas y cambios para alcanzar un nivel de sostenibilidad óptimo y hacer posible un turismo más verde.

 

Pistas para descubrir si un alojamiento es sostenible

Antes de hacer clic en el botón “reservar”, te invitamos a repasar estos 5 aspectos de tu próximo hotel para comprobar si es tan respetuoso con el medioambiente como piensas:

  1.   Diseño y construcción:

          Los alojamientos ecofriendly han sido construidos con materiales naturales y de la zona. Esto es, intentarán cumplir con los principios de construcción sostenibles que ya te contamos.

          Uno de sus objetivos será cumplir unas directrices bioclimáticas básicas para reducir a la mínima expresión el consumo energético (calefacción y aire acondicionado, sobre todo). Por eso, tendrán en cuenta la orientación y el aislamiento del edificio.

          Contarán con aparcamiento de bicicletas y puntos de recarga de vehículos eléctricos para contribuir a la movilidad sostenible.

 

  1.   En la habitación:

          Encontrarás carteles donde te sugieren que utilices las toallas o el albornoz en más de una ocasión para preservar el medioambiente. Es decir, hacen de la reutilización parte de sus valores.

          Artículos de higiene como geles y champú: obviarán incluir distintos botes de productos cosméticos en favor de dispensadores de pared. En caso de utilizar botellas, se decantarán por aquellas que en su fabricación utilizan materiales reciclados o que tienen un mínimo impacto ambiental en su producción y distribución.

          Amenities o “productos de acogida de huéspedes”. Nos referimos a todos esos objetos que los alojamientos regalan a los que se alojan para que su estancia sea más cómoda y agradable, desde productos de higiene y belleza (peines, cepillos de dientes, gorros de ducha…) hasta zapatillas de estar por casa. En el caso de ofrecerlos elegirán amenities con certificaciones éticas y ambientales que defiendan el comercio justo o elegirán empresas que luchen tanto por la dignidad de los trabajadores como por los derechos de los consumidores.

  1.   Gastronomía:

          Apostarán por cocina elaborada con productos de temporada, de negocios locales o de proximidad. Incluso podrán contar con su propio huerto para cocinar con frutas, verduras y hortalizas cultivadas por ellos mismos.

          Prefieren ofrecer comida a la carta en lugar de buffet libres para reducir el desperdicio de comida.

  1.   Energía:

          Utilizarán sensores de luz de movimiento para invertir lo mínimo posible en electricidad. Otra alternativa será cambiar la luminaria a LED o por sistemas de bajo consumo.

          Elegirán energías renovables o respetuosas con el medioambiente como placas solares para abastecer las necesidades eléctricas del alojamiento, tanto de iluminación como de climatización o refrigeración, entre otros.

          Pondrán en marcha sistemas de reaprovechamiento de agua o para reducir su consumo, especialmente si cuentan con piscina o balnearios en sus instalaciones.

 

  1.   Reciclaje:

          Reciclan la basura para que su impacto ambiental sea el menos posible. También ponen a disposición de los huéspedes los contenedores para que favorezcan el reciclaje de papel, plástico, vidrio e incluso aceite.

 ¿Sabes ya cómo distinguir un alojamiento sostenible de otro que no lo es tanto? ¿Cuál será tu próximo destino? Cuéntanos.